Carecen de aislamientos adecuados, pueden quedar al descubierto partes activas al deformarse sus envolventes, no son resistentes a la humedad o no superan el ensayo de rigidez dieléctrica.

Las autoridades de Consumo han ordenado en lo que va de año la retirada del mercado de ocho modelos de cargadores de teléfonos móviles peligrosos por riesgos eléctricos.

Los cargadores han sido incorporados a la red de alerta de productos no alimentarios peligrosos que coordina el Instituto Nacional del Consumo (INC) del Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad tras ser detectados por las administraciones de competentes del Gobierno Vasco (cinco modelos) y la Junta de Andalucía (tres).

La retirada del mercado se debe a la existencia de riesgos de choques eléctricos ya que los cargadores carecen de aislamientos adecuados, pueden quedar al descubierto partes activas al deformarse sus envolventes, no son resistentes a la humedad o no superan el ensayo de rigidez dieléctrica.

Los modelos que han sido retirados son:

– Cargador de teléfono móvil multifunción con nueve dispositivos multi-function cell phone charger, marca Feike, modelo TYP-03, item IBO-160.
– Cargador Universal Rápido, modelo LH-101.
– Cargador Multifunción 10 en 1, modelo LH-111.
– Kit cargador de coche y red 10 en 1, modelo YXT-040.
– Cargador de móvil universal, marca Tdscdma, modelo FK-030, ref. 6021702.
– Cargador USB 3 en 1, marca Super Power, modelo LH-USB-111.
– Cargador USB 3 en 1, marca Yichao Technology, modelo LH-USB-111 XM-2010633.
– Cargador de teléfono móvil, marca Mobile, modelo TC-988, referencia 4209.

FACUA pide a los consumidores que localicen uno de estos artículos o detecten defectos similares en otros cargadores que lo pongan en conocimiento de la asociación, indicando el nombre y dirección del establecimiento, a través de la página web tudenuncia.facua.org, para notificarlo y solicitar su retirada a las autoridades de Consumo.

FACUA reclama al Gobierno que las asociaciones de consumidores formen parte de las tres redes de alerta de productos inseguros, las de alimentos, fármacos y productos no alimentarios, para que cuenten con la información sobre los artículos peligrosos detectados en el mercado al mismo tiempo que las administraciones públicas y puedan darla a conocer a los usuarios.
Fuente:facua.org

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