Hoy se cumple un año que el famoso escándalo del trucaje de motores de Volkswagen saltó a los Medios. Doce meses en los que, desde Atención al Consumidor no hemos dejado de recibir y atender quejas de clientes afectados. Es, lo que los expertos han denominado como “Dieselgate”; un problema que va más allá de lo que muchos usuarios piensan.
Fueron la estrella comercial de los fabricantes de automóviles: motores que prometían más eficiencia, mejores consumos y menores índices de contaminación.
Los fabricantes parecen tener más claro el futuro… que el propio presente, ya que a día de hoy siguen sin dar solución a los miles de casos de afectados”.
La escalada de precios de la gasolina hizo que muchos dirigieran su vista hacia el gasoil: menor precio y mayor rentabilidad (al generar supuestamente menor consumo por Km). Era la panacea y nuestros viarios se llenaron de – los populares – “TDi”…. hasta que poco a poco fuimos conociendo la verdad.
La OMS demuestra que su humo provoca más Cáncer de lo esperado.
En el año 2012, y tras casi una década siendo un superventas, la Organización Mundial de la Salud hace públicos los resultados de un estudio iniciado – nada menos – que en 1.988. Las conclusiones son demoledoras: el humo de los motores diesel pasa de considerarse como (textual) “posible carcinógeno” (finales de los 80) para quedar catalogado como agente cancerígeno de nivel 2A, la misma categoría que el propio amianto. Su poder contaminante supera, incluso, en un 400% al del humo procedente de la gasolina.
Por éste motivo la OMS plantea la adopción de medidas tendentes a su control en un ambicioso Plan de Acción Mundial (Click en el enlace para ver el informe completo) que abarca desde el año 2013 hasta el 2020, cifra que – como veremos – puede marcar el fin de los motores de gasoil.
Varios fabricantes empiezan a “trucar” el nivel de emisiones.
Los productores de éste tipo de motores son conscientes de que tienen que hacer algo al respecto. Sin más demora. Lamentablemente optan por la solución más sencilla… pero menos ecológica.
En septiembre de 2015, la Agencia Ambiental de Estados Unidos (EPA) acusa al fabricante Alemán Volkswagen de estar cometiendo irregularidades en el sistema de emisiones de sus vehículos de gasoil. Tras numerosos estudios, la peor de las sospechas de confirma: no sólo Volkswagen, otras muchas marcas están afectadas por el escándalo del “Dieselgate” al vender vehículos cuyo motor se ha modificado para poder homologar cifras de emisión que no se corresponden con la realidad.
Los Consumidores se encuentran ante una situación compleja: “adaptar” sus vehículos a la legalidad supone una pérdida de prestaciones y eficacia del motor, no realizar tal operación… implica conducir auténticas bombas contaminantes que, en absoluto, cumplen con lo que se ofertó comercialmente.
La batalla entre fabricantes y compradores, se extiende a la práctica totalidad de los concesionarios españoles sin que ni la Unión Europea ni las propias compañías afectadas ofrezcan soluciones positivas (el Gobierno de USA sí ha obligado a los infractores adoptar medidas). Tras 12 meses, en Atención al Consumidor seguimos librando una compleja batalla diaria para hacer valer los Derechos de nuestros usuarios.
Año 2020: Se acabó el diesel.
Hace apenas unas semanas… y poco antes de que se cumpliera el fatídico aniversario del escándalo del gasoil, fabricantes como Renault, a través de su propio director, Thierry Bollore, ponen en duda la continuidad de éste tipo de mecánicas. Numerosas publicaciones financieras (como Expansión) arrojan serias dudas sobre la continuidad de éste sistema de combustible más allá de un año: el 2020; precisamente cuando – como hemos visto con anterioridad – finaliza el Plan de Acción de la OMS y, previsiblemente, las sanciones a posibles incumplimientos prometen ser cuantiosas.
Más contaminante, más caro (las versiones de gasoil suponen un mayor desembolso económico que sus homólogas de gasolina y el precio del carburante es muy similar) y menos eficiente que otras alternativas (como la eléctrica, que se va abriendo paso con fuerza en el mercado de la automoción). El final del motor diesel comienza a ser una realidad palpable.
En Consumo…. la lucha continúa.
Los fabricantes parecen tener más claro el futuro… que el propio presente, ya que a día de hoy siguen sin dar solución a los miles de casos de afectados por el trucaje de emisiones. Por éste motivo, en Atención al Consumidor, seguiremos luchando por hacer valer los Derechos de nuestros usuarios.
Si es usted uno de los afectados, no dude en trasladarnos su caso. Nuestro equipo técnico y humano está a su entera disposición.