El nuevo Impuesto de Patrimonio afectará a 160.000 contribuyentes con rentas superiores a 700.000 euros.
El gravamen se restablecerá con carácter temporal, para los ejercicios 2011 y 2012.
El Consejo de Ministros ha aprobado el restablecimiento del Impuesto sobre el Patrimonio, que afectará a alrededor de 160.000 contribuyentes con rentas superiores a 700.000 euros. La adopción de esta medida tiene como principal objetivo reforzar la estabilidad presupuestaria “de acuerdo con el principio de equidad, al gravar la capacidad contributiva adicional que representa la posesión de un patrimonio a partir de determinada cuantía”, explicó la vicepresidenta económica, Elena Salgado.
El gravamen del Impuesto sobre el Patrimonio se restablecerá con carácter temporal, para los ejercicios 2011 y 2012, a través de un decreto ley que no modificará la estructura del impuesto, que en la práctica había desaparecido puesto que llevaba tres ejercicios bonificado al 100%. El Ministerio de Economía justificó que la crisis económica hace necesario el restablecimiento de este impuesto, con la aplicación del principio de equidad, “de manera que permita gravar los patrimonios más elevados para que quienes más tienen contribuyan en mayor medida a la salida de la crisis, favoreciendo el cumplimiento de los objetivos de estabilidad asumidos por España“.
La recuperación del Impuesto de Patrimonio introduce, dijo Economía, una importante modificación “para evitar que se graven los patrimonios medios“. Así, se eleva el mínimo exento hasta los 700.000 euros por contribuyente, esto supone multiplicar por siete el mínimo anterior, “lo que excluye del gravamen a las clases medias, que eran en gran medida quienes lo soportaban hasta cuando se eliminó en 2008“, aseguró el Ministerio dirigido por Salgado. En el caso de núcleos familiares, la titularidad de los bienes y derechos que sean comunes a ambos cónyuges se atribuye por mitad a cada uno de ellos, salvo que se justifique otra cuota de participación, y se considera individualmente a la hora de calcular la base imponible del impuesto. También se eleva el mínimo exento para vivienda habitual hasta 300.000 euros, lo que supone doblar el existente hasta 2008.
Sobre la base de los datos correspondientes a las declaraciones del ejercicio 2007 (último en el que se exigió el gravamen), Economía ha estimado que el número de contribuyentes por este impuesto se situaría ahora en torno a 160.000, y que la recaudación anual podría ascender a unos 1.080 millones de euros si el impuesto se aplica con los mismos parámetros en el conjunto de España.
Fuente:consumer.es
