En los últimos años, y gracias a los avances de muchos dispositivos, las grandes compañías han logrado acceder a uno de los apartados más sensibles y delicados para el Consumidor: los datos que atañen a su salud. La reciente colaboración de Apple y Android en la lucha contra la Pandemia ha provocado que se disparen todas las alarmas.
Quizás ya lo hayáis visto: las dos grandes Tecnológicas del momento – Apple y Google – aúnan esfuerzos en su lucha contra el Coronavirus de una forma algo singular: prometen protegernos de aquellos individuos de nuestro entorno (personal ó geográfico) que hayan contraído el tristemente célebre Covid-19. La pregunta que todos nos hacemos es ¿cómo lo hacen? y si vamos un poco más lejos ¿es ético?, ¿es legal?. Os lo contamos.
Ha sido una noticia de las más sorprendentes de la semana: los gigantes tecnológicos que controlan el 98% de nuestros dispositivos médicos han firmado una alianza sin precedentes para facilitar la detección de aquellos Consumidores que son susceptibles de contagiar el Coronavirus (ver artículo). Sorprendente, ¿verdad?.
En realidad no debería serlo; ya que – desde hace años – dispositivos como el Apple Watch ó numerosas pulseras cuantificadoras, ofrecen a nuestro móvil (y a terceros) datos en tiempo real como nuestra presión sanguínea, frecuencia respiratoria, calidad de sueño… ó ¡salud reproductiva! (ver imagen de la derecha).
¡Cuidado con ésa APP!.
Lo realmente desconcertante es… ¿cómo detectan que tenemos Coronavirus?. En realidad no lo hacen. Se lo decimos nosotros…. y a veces por mala manipulación de determinadas APPs.
Seguro que, en éstos días, más de uno se ha descargado alguna de las aplicaciones Oficiales (¡ojo con ésto, OFICIALES!) del Ministerio, Comunidades Autónomas u otras Entidades Oficiales (insistimos). En ellas se nos ofrece un pequeño “triaje”, mediante preguntas, para saber si nuestros síntomas pueden reflejar un contagio por Coronavirus. Tal y como muestra Infobae en su artículo:
“Esto significa que si un usuario da positivo por COVID-19 e ingresa esa información a su aplicación de salud pública, los usuarios a los que se acerque durante los días siguientes serán notificados de su contacto“.
Así que, cuidado con responder de forma “lúdica” a éstos test y, mucho menos, hacer un uso indebido del sistema de contacto que llevan aparejado.
¿Es legal?
Queda por definir cómo será ése protocolo cuando se ponga en marcha, y cómo respetará la estricta normativa Europea establecida en el Reglamento General de Protección de Datos. El balance entre “seguridad” y “privacidad” debe medirse milimétricamente y, en cualquier caso, jamás debe vulnerar los Derechos más básicos del Consumidor. Os mantendremos informados.