Durante ésta semana la compañía norteamericana presenta al mundo sus dos nuevos modelos de telefonía móvil el 5S y el 5C. Según informaciones de la célebre empresa de la manzana, los nuevos iPhone no estarán disponibles en España hasta diciembre del presente año.
Coincidiendo con la campaña navideña, Apple hará llegar a España las primeras unidades de su nuevo producto estrella: el iPhone en sus versiones 5S y 5C. Los fans de la marca se apresuran a hacer las primeras reservas, pero… ¿Merece la pena cambiar nuestro antiguo iPhone?.
…Apple hará llegar a España las primeras unidades de su nuevo producto de cara a la campaña navideña “.
No habrá un Low Cost.
Apple ha desmentido una vez más (algo que ya ocurrió con la anterior generación) la puesta en el mercado de una de las llamadas versiones “low cost”, una versión más asequible del terminal que pueda pujar con Android en las gamas medias. Lo más parecido a éste concepto será el iPhone 5C; un teléfono fabricado en plástico y con unas prestaciones ligeramente superiores a las del antiguo 5 pero tan sólo un 10% (aproximadamente) más barato. Los antiguos usuarios del popular iPhone deberán plantearse si merece la pena renunciar al acabado y funcionamiento de su modelo por ésta novedad con acabados plásticos que ofrece algo más de velocidad y, eso sí, el presunto glamour de llevar en el bolsillo “lo último” en telefonía móvil.
¿Necesita un lector de huella o doble de velocidad?
…Aunque lo “último… último” es en realidad la versión 5S, un modelo con un coste ligeramente superior al del antiguo 5 pero que incluye un reconocimiento de huellas como sistema de seguridad (y en un futuro… se supone que como sistema de pago). Su velocidad de funcionamiento es también superior aunque, en éste sentido, poco podrá sorpender a los usuarios de iPhone, ya acostumbrados a la fluidez de funcionamiento de los anteriores terminales.
Entonces… ¿Me lo compro?.
En Atención al Consumidor recomendamos encarecidamente al usuario hacer una valoración de sus necesidades personales en materia de telefonía. Los nuevos terminales no son precisamente económicos (rondan los 700 €); aún con las pretendidas “ofertas” (que en ocasiones no son tales) de las distintas compañías de telefonía. Y éste es un monto difícilmente justificable para el usuario medio.
Los últimos avances en software y hardware permiten que el consumidor pueda disfrutar de las funciones más habituales (mensajería móvil, multimedia, descargas, imagen en HD) con total y absoluta fluidez y sin requerir de desembolsos superiores a los 300 €. Y eso que hablamos de terminales con excelentes prestaciones, acabados de calidad y una velocidad de funcionamiento muy destacada.
Los modelos de gama alta sí son una solución rentable para determinados colectivos profesionales que requieren de alguna ó algunas de las prestaciones concretas que ofrecen éstos terminales.
Por ello, evaluar la conveniencia de éste desembolso y su posible rentabilidad (más allá de la mera cuestión estética) ha de ser la prioridad a la hora de realizar la compra de un nuevo terminal, especialmente cuando muchos de tales modelos tienen un coste superior al del salario mínimo interprofesional en España. En muchas ocasiones…. el capricho puede salirnos muy caro.